QUÉ HACER SI DESPUÉS DE HACER EJERCICIO, TE DAN GANAS DE COMER DULCE

Recuperar las kilocalorías perdidas durante el ejercicio o a través del sudor, es la principal necesidad de nuestro organismo, ya que siempre tenderá al equilibrio. 

Es decir, si pierde una cantidad de agua y kilocalorías, necesitará recuperar esa energía y esa cantidad de agua lo más rápido que pueda. De ahí la sensación de hambre y sed. 

Es completamente normal que nuestro cuerpo demande el azúcar glucosa, porque las células crecen y se reproducen utilizando este azúcar. 

Cuando falta este azúcar, es cuando nuestro organismo debe producirla. Bien mediante el propio metabolismo, bien porque nos entra la sensación de querer algo dulce. 

Si no hay azúcar disponible, el cuerpo comienza a utilizar las grasas para obtener energía (comienza a quemar grasa).  

Estas moléculas de ácidos grasos son transformadas en moléculas parecidas a la glucosa (glucosa 6-P), y de ahí (si te fijas, es un poco de bioquímica), mediante algunos ciclos metabólicos o bioquímicos, es transformada en piruvato o Acetil CoA (sustancias intermediarias de estos ciclos), para producir moléculas de ATP, que es forma de energía que utiliza nuestro organismo. 


Habiéndote explicado un poco el mecanismo metabólico de la producción de energía del cuerpo, que utiliza el azúcar glucosa para obtener energía,  podemos entrar en materia. 

Si tienes diabetes tipo II, sabes que sufres de un desequilibrio en los niveles de glucosa en la sangre.  

Puede ser que debido a tu enfermedad, sientas urgencia por comer algo dulce más a menudo. Esto es porque las células no están recibiendo la glucosa que necesitan. Esto porque el azúcar de la sangre no puede llegar a las células de manera correcta; bien por falta de Insulina o por un mecanismo que impide que las moléculas de azúcar entren a las células.   

Por el contrario, si no padeces de diabetes y te dan ganas de comer azúcar, puede que se trate de hipoglucemia. Esta enfermedad se produce porque, después que consumes azúcar, el páncreas segrega una mayor cantidad de insulina que la normal, haciendo que los niveles de glucosa en la sangre bajen, y el cerebro demande más azúcar. 


En caso que padezcas alguna de estas 2 enfermedades, es mejor que suspendas los dulces, reemplazándolos por comidas sustitutas, tales como barras de cereal integral o frutas con bajo índice glucémico.  

Si de todas maneras tienes ganas de comer algo dulce, más por gusto y placer que por obligación, puedes tomar una bebida o comer un alimento endulzados con cualquiera de estos sustitutos del azúcar simple: 


- stevia (proveniente de hojas de la planta Stevia rebaudiana)
- splenda (endulzante artificial de sucralosa que aporta 0 kilocalorías) o  
- miel (1/4 de cucharada).


Ahora, si no sufres ni de diabetes ni de hipoglucemia; se puede tratar de un desequilibrio con tus niveles de dopamina y serotonina. 2 neurotransmisores que se encuentran implicados en las sensaciones de felicidad y alegría.  

Puede ser que tiendas a sentir ansiedad por comer algo dulce, ya que te has acostumbrado a hacerlo. Te hace sentir bien porque te llena y sientes que tienes mejor ánimo y más energía. 

Comer dulces cada vez que terminas de hacer ejercicio, es aconsejable hasta cierto punto. Si bien puedes sentir una sensación de alivio inmediato, estás ingiriendo algo que puede contribuir a la aparición de diabetes tipo 2 o hipoglucemia; si la cantidad de azúcar que ingieres es mayor a las kilocalorías que gastas el tiempo que haces ejercicio. 

CONSEJOS PARA DEJAR DE COMER DULCE DESPUÉS DE ALMORZAR 

Comienza por hacer dos comidas ricas en proteína, minerales (sodio, potasio) y vitaminas del complejo B. La primera, 1 hora y 1/2 antes de entrenar y, la segunda, 1/2 hora después de hacer ejercicio. 

Puedes elegir comer: 

- 1 fruta (1 banano pequeño), 
- 1 porción de nueces, 
- 1 vaso de yogur natural, 
- 1 huevo cocinado, 
- 1 vaso de leche entera, o 
- 1 lata de atún entera - Pequeña. (si sientes mucha hambre).  




ADEMÁS: 


Toma agua antes, durante y después de entrenar. Haciendo esto, poco a poco irá desapareciendo tu ansiedad y reemplazarás el dulce por alimentos saludables a la hora de las comidas.  

Puedes comer chocolate. Simplemente cambia el chocolate normal por un chocolate con menos calorías o grasa, reduciendo su consumo a solo 2 o 3 días por semana. Trata de comer chocolate después del almuerzo. Puede ser a media tarde.  

El chocolate negro es mejor que los demás porque tiene propiedades estimulantes del sistema cardiovascular y también antioxidantes que contribuyen a combatir y eliminar los radicales libres que se van generando continuamente. 

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