Muchas personas dirían que la clave para bajar de peso es dedicarse a hacer dietas saludables y efectivas, teniendo un día que dejar su rutina normal de alimentación para dedicarle toda su energía y concentración a un reducido número de alimentos y líquidos, que prometen solucionar el problema, sin afectar la salud.
Nada más equivocado que pensar que esto es así. Lo que muchas personas no tienen en cuenta es que el saber comer tiene dos connotaciones diferentes, igualmente importantes. La primera, tiene que ver con la forma como se consumen los alimentos, mientras que la segunda hace énfasis en la cantidad y calidad de los alimentos que consumimos; así como los hábitos alimenticios para lograr una nutrición equilibrada.
La importancia de saber comer, radica en 3 aspectos fundamentales: bajar de peso, mantener el peso ideal (usual) y mejorar nuestra salud.
Los siguientes consejos te ayudarán a lograr cualquiera de estos objetivos:
1. Mastica bien todos los alimentos, para mejorar la digestión. Ayudando a que las enzimas de la saliva comiencen a actuar sobre la comida, facilitas luego su posterior absorción.
2. Bebe líquidos (agua, sodas de dieta, etc) preferiblemente entre las comidas importantes.
3. Consume frutas con bajo índice glucémico (I.G.) y ricas en agua; en refrigerios o a media mañana o media tarde. Esto, porque las frutas, como acompañamientos, se fermentan en el estómago.
4. Lee con cuidado las etiquetas de los productos envasados. Si encuentras que, entre los ingredentes para su elaboración, existen derivados del azúcar refinado (dextrosa, edulcorantes como la maltodextrina); evita consumirlos.
5. Prefiere panes de grano o semilla entera; ya que se absrven más lentamente en el estómago; evtando la secreción de insulina en exceso; que a la larga, puede generar resistencia a la insulina.
6. Evita tomar cerveza. Esta tiene maltosa (azúcar blanco). La cerveza se puede reemplazar por vino tinto; porque el hollejo de las uvas contiene bioflavonoides (antioxidantes naturales), que ayudan a disminuir la adhesión de las plaquetas, además de oxigenar el colesterol malo (LDL).
7. No comas nada luego de las 7 de la noche. Luego de esta hora, los niveles de colesterol aumentan. También hazlo porque, comer a deshoras, produce indigestión.
8. Evita comer fritos y comida aderesada con harina. Reemplaza estas cocciones, por alimentos cocinados a la plancha, al vapor, o a la parrilla.
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Los siguientes consejos te ayudarán a lograr cualquiera de estos objetivos:
1. Mastica bien todos los alimentos, para mejorar la digestión. Ayudando a que las enzimas de la saliva comiencen a actuar sobre la comida, facilitas luego su posterior absorción.
2. Bebe líquidos (agua, sodas de dieta, etc) preferiblemente entre las comidas importantes.
3. Consume frutas con bajo índice glucémico (I.G.) y ricas en agua; en refrigerios o a media mañana o media tarde. Esto, porque las frutas, como acompañamientos, se fermentan en el estómago.
4. Lee con cuidado las etiquetas de los productos envasados. Si encuentras que, entre los ingredentes para su elaboración, existen derivados del azúcar refinado (dextrosa, edulcorantes como la maltodextrina); evita consumirlos.
5. Prefiere panes de grano o semilla entera; ya que se absrven más lentamente en el estómago; evtando la secreción de insulina en exceso; que a la larga, puede generar resistencia a la insulina.
6. Evita tomar cerveza. Esta tiene maltosa (azúcar blanco). La cerveza se puede reemplazar por vino tinto; porque el hollejo de las uvas contiene bioflavonoides (antioxidantes naturales), que ayudan a disminuir la adhesión de las plaquetas, además de oxigenar el colesterol malo (LDL).
7. No comas nada luego de las 7 de la noche. Luego de esta hora, los niveles de colesterol aumentan. También hazlo porque, comer a deshoras, produce indigestión.
8. Evita comer fritos y comida aderesada con harina. Reemplaza estas cocciones, por alimentos cocinados a la plancha, al vapor, o a la parrilla.
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