S i bien es cierto que hay dietas hipocalóricas  para bajar de peso que se pueden hacer de manera efectiva; no es aconsejable que una persona se dedique, así se trate de solo 3 días, a dejar de comer lo habitual para darle paso a una pérdida de peso pasajera.  Aparte de síntomas como cansancio, dolores de cabeza y el hambre atroz que les genera no comer de manera normal; también pueden exponerse de paso a posibles riesgos para su salud al provocar gastritis y hasta úlceras gástricas; pérdida del tejido muscular y problemas metabólicos por deficiencia de nutrientes de calidad. [1].   Nuestro organismo necesita, además de azúcar simple y agua; carbohidratos complejos, proteínas, gracias y, por supuesto, vitaminas y minerales. Al faltar uno de estos compuestos en la dieta,  este fabrica lo que le hace falta hasta donde le es posible; tratando de conservar al máximo, su propia estructura (menos los nutrientes esenciales como aminoácidos y grasas esenciales que deben ser ingeridos me

< " Necesito comer un bocadillo " >. Es lo que muchas personas dicen cuando tienen hambre y no ha llegado la hora de la comida principal.  Si se trata de cuidar el peso, la culpa por imaginar un bocado de alimento con muchas kilocalorías o con mucho dulce y/o considerado como una harina, asalta y nos hace entrar en pánico.  En muchas personas es claro que surge la indecisión por el desconocimiento sobre lo que deben comer a la hora de "picar" algo.  - ¿Qué debo comer?  - Siento mucha hambre y tengo ganas de algo dulce ¿Será que si como dulce me hará daño? - ¿Y si fracaso en mi objetivo por mantener la dieta que estoy haciendo? Estas y otras preguntas (tal y como el presentador de un programa de tv local dice cada semana) surgen inmediatamente.  La buena noticia es que esta tentación puede ser llevadera, así como el esfuerzo que haces para cuidar tu alimentación y salud.   LA DIETA DEL BOCADILLO    Es una dieta idead

Hoy en día los problemas digestivos son más comunes que antes. Esto se debe, en parte, a la aparición de alimentos procesados y con cantidades considerables de azúcar y conservantes y  a los hábitos alimenticios y de ejercicio .  Dentro de los malos hábitos alimenticios se encuentran el estrés, la falta de tiempo y el descuido de muchas personas por su alimentación (su mala alimentación), incluyendo dietas rápidas y restrictivas de 3 o 5 días, dietas de ayuno intermitente o de alimentos que no aportan muchos nutrientes (calorías huecas o vacías provenientes de comida azucarada, el alcohol o la comida procesada como sopas instantáneas y la de paquetes).  Si el aparato digestivo se ve comprometido con algún problema de consideración; la absorción de los nutrientes de la comida, también [1].  Es por esto que la solución más simple es aportarle a nuestro organismo los nutrientes que necesita, en una comida de fácil preparación, natural y sin azúcar ni conservantes añadidos.  No e