Es evidente que; varias personas sometidas a una misma dieta de adelgazamiento; no lo hacen a la misma velocidad. Partiendo de ese hecho; el nutricionista que propuso esta dieta; Peter D'Adamo; pensó que podía deberse a la diferencia del grupo sanguíneo de cada persona. Dedujo que, según el grupo de cada quien; así deberían ser los alimentos adecuados. En un principio; parece que el grupo sanguíneo de cada persona no tiene relación alguna con la alimentación. Pero; sobre todo, no parece ser que un determinado tipo de sangre deba reaccionar de manera distinta ante moléculas de proteínas, carbohidratos o grasa (es decir; no parece que reaccionan ante un trozo de carne magra; por supuesto). Es bueno entonces; aclarar el tema del grupo sanguíneo; con el objeto de desmentir algunos puntos de esta dieta.